Aegon
El amanecer se acercaba y la niebla que rodeaba el castillo comenzaba a disiparse. Alzó un poco el vuelo sobre Balerion y por fin la vio. La impresionante fortaleza de Harrenhal.
Soltó un bufido. Ciertamente parecía
inexpugnable. Harren había logrado construir la mayor fortaleza jamás vista en
Poniente, incluso podía competir en tamaño y esplendor con Rocadragón. Esto no
le gustaba nada, debía hacerse con la fortaleza rápidamente o tendría serios
problemas. Había recibido informes que confirmaban que Loren Lannister por fin
había movido ficha y se dirigía con su ejército hacía Altojardín, sin duda para
unir fuerzas con Mern Gardener del Dominio. No conocía los planes de esa nueva
alianza, pero no hacía falta ser un genio para adivinar que si el ejército
bajaba al sur era para atacar Bastión de Tormentas, o eso pensaba. Además, no
podía olvidar al Norte. Hasta ahora se habían mantenido en silencio, pero el
Norte y los Stark eran orgullosos, la sangre de los primeros hombres corría por
sus venas y no se rendirían fácilmente. Fuera como fuese, necesitaba Harrenhal.
No podía quedar atrapado entre dos ejércitos.
El repicar de las campanas de
Harrenhal lo sacó de su ensimismamiento. Bajó en picado y aterrizó al frente de
su ejército. Desmontó y se acercó a sus comandantes. Lord Crispian y Lord
Tristan parecían tranquilos, pero Edmyn Tully estaba muy serio. Era muy joven
para dirigir ya una Casa, pero ese joven había mostrado más inteligencia y
astucia que muchos de los hombres que decían considerarse expertos en el arte
de la guerra. Gracias a Tully, a su carta y a sus ambiciones, había logrado
hacerse con la mitad del ejército de Harren, de sus vasallos, y matar a sus
hijos. Todo, sin perder a un solo hombre. Le debía mucho, por ello había
decidido nombrarlo Señor Supremo del Tridente cuando derrotara a Harren y
ascender a la familia Tully a una de las grandes Casas de Poniente.
-
Informe – dijo al
llegar hasta ellos.
- El cercano pueblo
de Harrentown ha sido abandonado. – contestó Crispian - Creemos que sus habitantes
se han refugiado en el castillo o han huido hacía el sur. El restante ejército
de Harren, así como él y sus nietos se encuentran en la fortaleza.
-
Tienen la confianza
en que esas murallas lo protegerán. – reflexionó Aegon.
- Yo también lo
pensaría – puntualizó Tristan – Ciertamente, la fortaleza parece invencible.
-
No para mí – Aegon
se dio la vuelta y comenzó a caminar sólo hacia Harrenhal.
Oía el griterío de los soldados
sobre las murallas. Podía ver a los arqueros cargando sus armas. Se detuvo justo
en el punto exacto y observó como una lluvia de flechas descendía sobre él…para
clavarse sobre la tierra a tres metros delante de él. Sonrió. Desenfundó a
Fuegoscuro y la pinchó sobre la húmeda tierra. Se quitó también el yelmo y lo
colocó sobre el pomo de la espada. Se cruzó de brazos y esperó.
Harren no tardo en salir a la
muralla situadas sobre la puerta principal. El silencio se extendió entre los
defensores.
- Os ordeno que abandonéis
mis dominios o juro que os mataré com mis propias manos. - Aegon comenzó a reír
con fuerza.
- Harren, os concedo
la oportunidad de rendiros y ninguno de vuestros hombres ni de vuestra familia
sufrirá daño alguno. Os dejaré en libertad y os ofreceré ser mi vasallo
gobernando las Islas del Hierro, que antaño fueron el origen de vuestro linaje.
- ¡Jamás!! No tenéis
poder sobre mí. ¡¡MI CASTILLO ES INEXPUGNABLE!! Vuestro ejército chocará como
las olas del mar sobre un acantilado. Sin logar arañar ni siquiera la
superficie.
- Así sea Harren
Hoare. Hoy acabará vuestro linaje. A partir de hoy todo el mundo sabrá las
consecuencias de enfrentarse a mí.
“Maldito estúpido”- pensó- “Ya
estaba harto de ese vejestorio. Ahora conocería íntimamente el lema de su casa…
Fuego y Sangre”. Recogió el yelmo y su espada y retrocedió hasta su ejército.
-
Listos para atacar,
su alteza – le dijo Tristan nada más llegar.
-
No. Yo me ocuparé
de esto. Sólo.
- ¿Qué? ¿Cómo… - se
interrumpió al ver como Aegon llamaba a voces a su dragón. Balerion aterrizó a
un par de metros de allí.
- Cuando salgan del
castillo para huir….Matadlos a todos… -
“¿Por qué había dicho eso? Sentía que era lo correcto. Todas las fibras de su cuerpo vibraban con fuerza, necesitan calor, y él se lo daría”
Montó sobre Balerion. Se ajustó la
capa. Se colocó bien el yelmo. Desenfundó a Fuegoscuro y alzó el vuelo.
Avanzaba sobre las nubes. El Sol estaba saliendo justo a su espalda. Podía ver
que tanto su armadura como las escamas del dragón brillaban con fuerza por la
luz solar.
Descendió en picado sobre el
castillo y gritó “DRACARYS”. Balerion soltó su mortífero aliento, llenando las murallas
de un abrasador fuego negro. Los soldados gritaban mientras el fuego los
envolvía. Sobrevoló el patio interior y también allí soltó su furia. Continuó
sobrevolando el castillo sin dejar de alimentar el fuego.
Todo estaba envuelto
en llamas. Veía a soldados arder, a mujeres a niños… No podía pensar…sólo sentía
una enorme satisfacción. Notaba cada célula de su cuerpo…sentía como el calor
lo reconfortaba y lo alentaba a seguir con aquello. Las flechas chocaban contra
su armadura y su yelmo. Una flecha logró clavarse en su pierna, pero no le
importó. Igual que tampoco le importó que su capa comenzara a arder. Notaba un
cosquilleo en la espalda, allí donde el fuego lo acariciaba.
-
¡¡NOOOOOO!!
Aegon alzó la vista y observó como Harren gritaba desde la
ventana de una de las torres. Alzó el
vuelo y llegó hasta la ventana. Harren estaba desecho en lágrimas mientras
abrazaba a dos niños pequeños. “Serán sus nietos”- pensó Aegon. Harren se
sobresaltó cuando lo vio aparecer frente a él.
- Piedad…por favor…lo
siento…¡¡Por favor!! – decía todavía llorando – Mis nietos…
- Dracarys… - El
fuego entró por la ventana y abrasó a todo a su paso. El grito de los niños
sacudió algo en su interior. “¿Qué había hecho?”
Alzó aún más el vuelo y comprobó su
obra. Todo Harrenhal parecía una bola de fuego. La fortaleza se deshacía por
momentos. Avanzó hasta la puerta y
contemplo como decenas y decenas de personas estaban muertas a los alrededores
del castillo. Sus hombres habían llevado sus órdenes hasta el final…
El fuego aún seguía vivo en algunas
zonas del castillo. Todo el cielo estaba cubierto por una gran nube de humo y
cenizas. Habían tenido que protegerse la boca y la nariz con pañuelos para evitar
asfixiarse con la ceniza. ¿Cómo había podido matar a los niños? No dejaba de
darle vueltas a aquello ¿Qué clase de monstruo era? Rhaenys lo odiaría por
ello…No, no…debía pensar más en esto… o se volvería loco…Lo que está hecho no se
puede cambiar.
Paseaba alrededor de Harrenhal cuando tropezó con una espada en
el suelo. Estaba ennegrecida y quemada. La cogió. Aún estaba caliente. De
pronto tuvo una idea.
- ¡Tú! – dijo a uno
de sus soldados. El soldado se acercó raudo – Recoged todas las espadas que
podáis.
“Un Rey necesita un trono” - pensó
sonriendo.
¡Vaya masacre (por fin, jajajaja)! A ver cómo reacciona Rhaenys ante esto, porque matar a todos, incluso niños, no es muy piadoso. Muy bueno el detalle de la espada para forjar el trono, jejeje.
ResponderEliminarA seguir así :D
jejeje Tenía ganas de escribir este capi ^^ Ha sido todo muy heavy xDDDD Achicharrados todos xDDD
ResponderEliminarMuy bueno el capítulo María mira que matar a los niños un beso soy Mayte
ResponderEliminarHola. ^^ Se ha flipado un poco xDDD
EliminarGenial este capítulo, es bueno ver esa crueldad en Aegon porque con piedad es imposible que conquistara los Siete Reinos, y mucho menos si llevaba dragones. Tuvo que ser una masacre terrible.
ResponderEliminarMe he encantado, además nos has recompensado la espera con un capítulo más largo de lo habitual sin hacerlo pesado. Perfecto ^^
Tengo ganas de ver cómo reaccionara Rhaenys ante esto. Visenya es todavía más cruel que Aegon, pero Rhaenys con lo dulce que es... tengo interés por saber su reacción e.e
¡¡Muchas gracias!! ^^ Como ya he dicho, tenía ganas de llegar a este capi porque es clave en la Conquista ^^ Y sí, coincido totalmente en que no conquistas Poniente siendo un buenazo. También quería mostrar esa relación enfermiza de los Targaryen y el Fuego ^^
EliminarPronto veremos la reacción de Rhaenys ^^
Está increíble!!!!!!!!! Me ha encantado y me ha provocado un montón de pensamientos y sensaciones.
ResponderEliminarMira el Brynden cómo le dio la alcurnia a su familia. y Aegón, valiente hijo de puta, si es que yo nunca fuí muy pro Targaryen salvo Danny que no me cae mal. Pero me ha gustado mucho cómo lo has narrado, cómo se ha desarrollado TODO; y el final, ESE FINAL, no me esperaba lo del Trono. Muy muy bueno. Gracias por este fic :DDDDD
Esperando el próximo capítulo.
Cristina
Ah, muchísimas gracias por mencionarme. Muakkkkkkkkk
Muchas gracias por comentar ^^ Tenía ganas de llegar aquí y estaba ansiosa por que el capi saliera bien ^^ Aegon ha despertado totalmente ha su lado Targaryen...para bien o para mal... xDD
EliminarMe hubiese encantado que el Dracarys para los niños lo hubiese dicho sonriendo, pero que se le va a hacer...
ResponderEliminarMuy buena historia y muy bien narrada.
Muchas gracias :)
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